Cuando me topé ésta frase sobre tomar decisiones, me pregunté; ¿Tú tomas algo para ser feliz?, Sí DECISIONES. Y la hice mi mantra, cada vez que me siento mal por algo, que me impide disfrutar de mi felicidad, me digo a mi misma ¿tiene solución, sí, o no la tiene? Si la tiene, por más dura que sea la tomo, al mal tiempo hay que darle prisa.
Y apenas tuve, la primera oportunidad se la recité a una amiga, como hoy te la paso a ti.
A veces nos equivocamos al tomar decisiones, y nos cuesta perdonarnos a nosotros mismos, cuando tomamos las peores inclusive aunque nuestra razón y nuestra intuición nos adviertan, algunas personas vivimos al ritmo de nuestras emociones y tomamos decisiones impulsivas producto del miedo, la obstinación, la tristeza, la ira o la euforia del momento. Hoy en día he logrado disminuir el margen de error en mis acciones controlando mis emociones gracias al Mindfulness y la introspección.
Y en atención a mi última entrada, te voy a ofrecer estos 14 Consejos que quizás te funcionen para tomar la mejor decisión posible:
1.- Poner a un lado las emociones. Las emociones no deben decidir por ti, pues si te dejas llevar por la incorrecta podrían ser malas consejeras.
2.- Ningún sentimiento o emoción debe estar a merced de la razón y viceversa. Es decir, debe haber congruencia. Si eres una persona sana, no podrías tomar una decisión que te cause infelicidad ( a menos que seas persona masoquista y disfrutes del dolor).
3.- Debes tomar una decisión que te beneficie a ti, en primera persona, y preferiblemente que beneficie a otros, sean estos conocidos o no. Actúa de Buena Fe. Si tomas una decisión que dañará a otros y lo sabes, tendrás que pagar un precio por ello. Se llama Karma.
4.- Cuando tomes una decisión procura asegurarte de no causar daño a otros, el karma debe ponerlos en su lugar no tú. Si decides hacer de justiciero recuerda que todo sentimiento negativo carcome el alma, a veces la mejor venganza es dejar que el destino ponga las cosas en su lugar, te garantizo que la justicia siempre llega.
5.- No tomes decisiones basadas sólo en una sola definición de Justicia, abre tu mente y escucha otros criterios. Busca la solución menos dañina para todos, y la más equitativa. No dejes que preceptos inculcados por terceros te digan, cómo ser feliz, descúbrelo por tí mismo.
6.- No escuches sólo tu razón, al racionalizar demasiado tendemos a descuidar la intuición y esa es la pieza clave.
7.- La intuición es esa primera sensación o reacción que tu cuerpo emite ante un estímulo, si sientes miedo quizás sea un miedo condicionado (un miedo inducido y no uno real) la intuición se anticipa a la decisión consciente.
8.- Hazle caso a tu cuerpo, puedes sentir frío en la panza cuando piensas en una opción, como cuando ves dos caminos y uno se ve oscuro y te da escalofríos, tu cuerpo sabe cuando puedes estar tomando un riesgo.
9.- Pide consejo a personas más sabías que tú, los adultos mayores saben por donde asustan, es inteligente buscar a alguien con más experiencia que uno para informarse y tomar una decisión bien sustentada.
10.- Si se trata de decisiones financieras, o de legalidad es mejor consultar a un experto, que arriesgarlo todo en una corazonada o en la mera intuición.
11.- Aprende a distinguir deseo, de probabilidades. Espejismos de realidades, y la mejor forma es estar muy informado de todo lo que tenga que ver con el tema de dificultad.
12.- Hay decisiones que pueden cambiarnos la vida, escoger a la pareja inadecuada, suspender un embarazo no deseado (forzado), perder tu casa por una apuesta, o la mujer de tu vida por darle prioridad a tu carrera. Recuerda que si tu no eres feliz, no serás capaz de hacer feliz a nadie.
13.- Piensa si lo que decidirás hoy te ayudará a que tus sueños se hagan realidad en el futuro, y si esa es tú felicidad, lo que realmente deseas, no lo postergues más y da el paso que debes dar hoy mismo. Lo único irreversible es la muerte.
14.- Pídele consejo a un ser superior (Dios, Mahoma, Alá, Ángeles, Vírgenes, Santos o al Universo, pídele una pista a tu doble cuántico, busca una señal, una guía, a través de un sueño o un mensajero, y el mensaje se te revelará si tienes fe.
15.- Siempre que se trate de una decisión sobre tu cuerpo, tu autonomía, y tu felicidad sólo te compete a ti, a nadie más.
Algunas decisiones son más dramáticas que otras, el aborto, la eutanasia, el suicidio o seguir viviendo...
Y que la suerte siempre esté de tu lado.
Esa es la decisión más difícil y más valiente de todas Seguir Viviendo, pero no vale la pena si no es para ser feliz, por eso sea lo que sea que decidas debe ser lo mejor para ti, sin perjudicar a terceros, es decir sin la intensión de lastimar de manera consciente a otros.
Por eso se llaman decisiones, si son inconscientes son accidentes o involuntarias, pero dejemos algo en claro algo, la gente no se embaraza por accidente, si fueron a la cama de manera consciente, consensual y se da un embarazo, no fue un accidente, fue la consecuencia de una una decisión tomada. Si decides practicarte un aborto porque no deseas ser madre es tu cuerpo, tú decisión. Pero dejen de llamar a los hijos accidentes, golazos, metidas de pata, de casarse por compromiso, de parir por obligación.
Cuando actuamos de manera irresponsable hay consecuencias, siempre las habrá, dejar de culpar a la mala suerte o a terceros, a la brujería, a los inmigrantes.
Madurar y asumir las consecuencias de tus DECISIONES, así que procura tomarlas muy bien, porque sólo tienes una oportunidad tienes en ésta vida plenamente.
Te recomiendo leer: Cómo tomar una decisión difícil cuando hay amor.
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